Estamos siendo testigos del escándalo que han desatado las declaraciones de Jaime Bayly, respecto a la “celebración” (si se quiere) por parte de los integrantes de la selección el día domingo 18, después del empate frente a Brasil. Que si llevaron amigos y estos a su vez llevaron amigas a visitarlos, que si “Pizarrón” jaló a Paolo, que si el Chavo (seguridad de J. Farfán) compró el trago y mil etc. más.
En primer lugar para quienes conocen de concentraciones y este tipo de temas deportivos, saben que hasta el mismo equipo brasilero tiene miembros de seguridad con quienes viaja y son los encargados de no dejar salir ni el aire que respiran los integrantes del scratch (sabidas son las aficiones y arrebatos hormonales de varios jugadores brasileros). Con Perú fallaron muchas cosas, en primer lugar debemos preguntar ¿porqué la Comisión Sudáfrica 2010 no puso elementos de seguridad a la salida de las habitaciones o es que de verdad creen que nuestros muchachos son “demasiado profesionales”?... Ese es otro tema, la falta de profesionalismo de nuestros “engreídos”, es que a pesar de jugar en Europa y hacer grandes actuaciones (algunos), de profesionales no tienen ni el cartón, más profesional resulta ser cualquier taxista de tico que se pasea con su título de ingeniero pues no encontró trabajo o simplemente fue despedido del último.
El engreimiento es otro factor a evaluar, la segunda pregunta sería ¿porqué la F.P.F. teniendo modernas instalaciones, construidas especialmente para concentrar a sus selecciones, tiene que pagar por ese servicio a terceros?... por un pedido expreso de los jugadores, ahora sabemos con que intenciones pusieron todos los pretextos para no concentrar en Videna, que si la bulla, que si las camas, que si los baños. Pero la culpa no es del engreído, sino de quien engríe; les pagan pasajes de ida y vuelta en primerísima primera clase y cobran premios por ganar y perder partidos, imagínense cuanto recibirán si ganan.
Y a todo esto, aquí viene la tercera y última pregunta, ¿a dónde estuvieron los integrantes del comando técnico? No nos digan que recibiendo la visita de amigas en sus habitaciones porque les podemos creer. Lo cierto es que no estuvo nadie para poner disciplina o por lo menos restringir las visitas, aunque ya demostraron los muchachones que de “Visita” juegan mucho mejor.
En primer lugar para quienes conocen de concentraciones y este tipo de temas deportivos, saben que hasta el mismo equipo brasilero tiene miembros de seguridad con quienes viaja y son los encargados de no dejar salir ni el aire que respiran los integrantes del scratch (sabidas son las aficiones y arrebatos hormonales de varios jugadores brasileros). Con Perú fallaron muchas cosas, en primer lugar debemos preguntar ¿porqué la Comisión Sudáfrica 2010 no puso elementos de seguridad a la salida de las habitaciones o es que de verdad creen que nuestros muchachos son “demasiado profesionales”?... Ese es otro tema, la falta de profesionalismo de nuestros “engreídos”, es que a pesar de jugar en Europa y hacer grandes actuaciones (algunos), de profesionales no tienen ni el cartón, más profesional resulta ser cualquier taxista de tico que se pasea con su título de ingeniero pues no encontró trabajo o simplemente fue despedido del último.
El engreimiento es otro factor a evaluar, la segunda pregunta sería ¿porqué la F.P.F. teniendo modernas instalaciones, construidas especialmente para concentrar a sus selecciones, tiene que pagar por ese servicio a terceros?... por un pedido expreso de los jugadores, ahora sabemos con que intenciones pusieron todos los pretextos para no concentrar en Videna, que si la bulla, que si las camas, que si los baños. Pero la culpa no es del engreído, sino de quien engríe; les pagan pasajes de ida y vuelta en primerísima primera clase y cobran premios por ganar y perder partidos, imagínense cuanto recibirán si ganan.
Y a todo esto, aquí viene la tercera y última pregunta, ¿a dónde estuvieron los integrantes del comando técnico? No nos digan que recibiendo la visita de amigas en sus habitaciones porque les podemos creer. Lo cierto es que no estuvo nadie para poner disciplina o por lo menos restringir las visitas, aunque ya demostraron los muchachones que de “Visita” juegan mucho mejor.
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